¿Sabes qué es la arquitectura de la información? Alguna vez te has planteado, si el modo en que estás presentando el contenido a tus usuarios es el más óptimo para tu posicionamiento SEO y para facilitarle a tus visitantes encontrar aquello que vinieron a buscar en tu sitio Web.
Es probable que éste sea un término que no hayas escuchado nunca o que puedas llegar a pensar que no es demasiado importante, tanto para mejorar las contrataciones de tus servicios o la compra de tus productos, en caso de tener un eCommerce.
Pero como te demostraré en este artículo, tener una arquitectura de la información optimizada puede hacer que éstos encuentren rápidamente la respuesta a su intención de búsqueda o que salgan de tu Web, entrando en la de la competencia y que conviertan finalmente allí.
¿Qué es la arquitectura de la información?
La Arquitectura de la Información es la disciplina responsable del estudio, análisis, estructuración y organización final de los contenidos en espacios digitales, así como de la selección, disposición y presentación de los datos en los sistemas interactivos y no interactivos.
Éste es un aspecto que cada día cobra más relevancia para el SEO, atendiendo a una necesidad cada vez mayor de poner orden en el modo en que servimos la información para mejorar la experiencia del usuario.
Se trata, en definitiva, de elegir el “cómo y por qué” decido compartir esa info y cuál es la mejor forma de ofrecerla en tu Web.
Otra definición de arquitectura de la información web
La definición anterior, vista así, puede parecer algo abstracta, por lo que quizás prefieras quedarte con ésta otra:
La arquitectura de la información es la forma en la que organizamos tanto las URLs como el resto de contenidos del sitio Web, con el fin de fomentar la facilidad de uso y la localización de los elementos (findability).
Y es que, hoy en día, algunas páginas sí que cuentan con una arquitectura lógica que ayuda al usuario en todo momento a encontrar lo que busca en ellas. Otras, sin embargo, carecen de cualquier tipo de estructura reconocible, dificultando así su navegación.
No encontrar el producto que buscamos, perdernos por los diferentes pasos de compra de un eCommerce o no encontrar un artículo que leíste el mes pasado en un determinado blog, son ejemplos de una mala estructuración de los contenidos de una Web, con las consecuencias ya comentadas anteriormente en la introducción…
La facilidad de localización, por tanto, es un factor fundamental para conseguir que la experiencia del usuario (y por tanto la usabilidad del site) sea óptimo.
Si los usuarios no pueden encontrar lo que buscan mediante una combinación de exploración, búsqueda e interrogación, el sitio fracasará.
¿Cómo aplico una óptima arquitectura de la información a mi proyecto?
Si gestionas una Web o blog estoy seguro que ya estás aplicando o teniendo en cuenta en mayor o menor medida acciones propias de la arquitectura de la información, puesto que aspectos como la usabilidad web, el diseño y arquitectura Web son puntos que guardan mucha relación.
Todo esto te lo desmenuza con más lujo de detalles a continuación, más concretamente Noelia Regalado, en este vídeo correspondiente a mi Congreso Online Posiciona:
Aspectos a tener en cuenta al crear la arquitectura de la información en mi proyecto digital
En cualquier caso, los puntos más relevantes que tenemos que tener en cuenta al analizar este concepto son éstos:
1) De qué tipo de Web se trata
En este primer paso, deberías contemplar qué tipo de negocio es el que queremos analizar: un site corporativo, un blog, una tienda Online, etc.
Si la arquitectura que vas a analizar es la de tu propio negocio, obviamente este primer aspecto lo tendrás bastante claro, pero en todo caso deberías no pasarlo por alto cuando te toca hacerlo para la Web de un cliente, por ejemplo.
2) Arquitectura Web
Dentro de este factor que podemos englobar dentro de la arquitectura de la información, hay que distinguir varios tipos:
Vertical
Aunque vemos en la actualidad pocos sitios con esta tipología, es importante que la conozcas, ya que puede ser que todavía encuentres alguna.
Un claro ejemplo de ésta puede ser la página de una inmobiliaria, las cuales suelen tener un buscador, donde puedes filtrar el tipo de piso o casa que buscas por provincia, luego por población, después por el distrito (muy común en grandes ciudades como Madrid o Barcelona) y finalmente puedes buscar el tipo de vivienda que quieres encontrar dentro del portal.
Horizontal
Bastante usual es encontrar sitios en los que la información disponible esta organizada de manera horizontal.
Es decir, donde tenemos la página principal o «home», de la cual «cuelgan» diferentes URL’s, todas ellas en el mismo nivel estructural, donde cada una de ellas consiste en una guía o tutorial de un producto concreto.
Esto es muy común verlo en los blogs de nicho, los cuales sirven básicamente para monetizar a través de publicidad de Google Adsense o afiliación de Amazon u otros marketplaces con plataforma propia para recibir comisiones por venta.
» También te interesa leer: Guía para encontrar un micro nicho de mercado
En SILO
En este caso, estamos hablando de un tipo de arquitectura de la información que mezcla en cierta manera la forma vertical y horizontal de organizar el contenido de un proyecto Web.
Me explico: tendría como base una estructura vertical, aunque cada una de las ramificaciones se podría bifurcar en varias; pero a su vez, por la tipología de estas ramificaciones, ninguna de ellas se enlazaría entre sí con la otra ramificación.
Mirándolo desde el punto de vista de un eCommerce (por ejemplo de zapatos) observando desde la página principal o «home», a ésta la colgaría diferentes categorías de productos.
Siendo éstos: «de hombre», «de mujer», «de bebés», a su vez a cada una de estas categorías se le asignaría varios productos.
En el caso de los masculinos, podríamos tener «zapatillas de deporte»; «chanclas»; «botas de lluvia», etc.
Sin embargo, entre «zapatos de hombre» y «zapatos de mujer» nunca se enlazarían entre sí, así como entre fichas de productos pertenecientes a diferentes categorías principales.
Para que lo termines de comprender, en esta infografía de Publisuites seguro que lo ves más claro:
AD Hoc (a medida)
Pese a que los tipos anteriores es muy posible encontrárnoslos en diferentes tipos de proyectos en Internet, el más común quizás sea éste.
Y es que, ciertamente, es el más real, ya que se trata de un enlazado y vinculación mixta entre URL’s, a través del cual el trabajo de Link Building se realiza en base a aquello que queremos optimizar dentro de la Web.
Siguiendo el ejemplo anterior de una zapatería, podríamos encontrarnos el ejemplo (contrario a la tipología SILO) donde en la ficha de productos de unos zapatos de tacón rojos para mujer enlacemos a unos zapatos de fiesta negros para hombre, suponiendo que una pareja va a asistir a un evento importante y ambos necesitan calzarse.
3) Estructuración del contenido (etiquetas meta, H1, H2,…)
El orden y lugares donde coloques tus títulos y subtítulos también tendrá una gran relevancia, ya que una de las utilidades que tienen los H1, H2, H3, etc. es precisamente esa, la de estructurar los contenidos de una manera lógica y que permitan al usuario y a Google comprender mejor de qué tratan los mismos.
Además, debemos poner en valor y ayudarnos de un buen Keyword Research o análisis de palabras clave, analizando las principales keywords que definen a nuestro negocio y por las que pretendemos hacernos un hueco dentro de nuestro nicho o sector profesional.
4) User Experience (UX)
Como ya te he mencionado anteriormente, la experiencia del usuario será uno de los pilares fundamentales a tener en cuenta a la hora de optimizar la arquitectura de la información.
Esta es, precisamente, una de las razones por la que estructurar nuestros contenidos de manera óptima: para ofrecer a nuestros visitantes la mejor experiencia posible.
5) URLs indexables
En este apartado podremos analizar qué URL’s de nuestro proyecto digital se indexarán para que el buscador las pueda encontrar y cuáles no.
¡Crea contenidos adaptados al usuario, pero a la vez orientados a tus objetivos!
Sin embargo, no basta con centrar el diseño en el usuario. Tenemos que buscar el equilibrio perfecto entre los usuarios y los objetivos de la Web.
Por un lado, queremos que el usuario se sienta cómodo y que encuentre lo que está buscando.
Y por otro, tenemos que conseguir que el usuario encuentre, compre o lea lo que al gestor del sitio le interesa (un producto estrella, una landing page o un artículo de afiliados para poder convertir).
Es decir, tenemos que centrar nuestros esfuerzos en conseguir un site que cumpla con los principios de usabilidad de cara al usuario, pero que a su vez cumpla los objetivos que la empresa se ha marcado.
¿Por qué la arquitectura de la información es tan importante para tu Web?
Es probable que, llegado a este punto, aunque sepas qué es, te estés preguntando cómo puedes llegar a saber si la estás implementando bien.
Estas son cuestiones que voy a intentar explicarte de una forma sencilla a lo largo de este artículo.
Pero antes de hablar más profundamente sobre arquitectura de la información, vale la pena compararla con la que todos conocemos.
La arquitectura tradicional busca crear un edificio o una casa que sea estéticamente bonita y que funcione perfectamente para el propósito que se ha diseñado.
No es lo mismo diseñar unas oficinas que un parque de bomberos.
Cada uno tiene sus características propias y unos usos bien diferenciados. Lo que implementes en uno de los dos edificios no tiene porque servirle al otro.
La Arquitectura de la Información supone lo mismo pero con la información que queremos mostrar al usuario. Se puede aplicar a cualquier grupo:
- Una página web
- Un Blog
- Un eCommerce
- Los datos de la intranet de una empresa
¿Qué hace concretamente un arquitecto de la información?
Ya te lo habrás imaginado.
El arquitecto de la información es la persona encargada de coger las diferentes piezas que componen una Web y darle la forma para que trabaje tan precisamente como un reloj suizo.
Tiene que tener contacto con todos los departamentos que de alguna manera (directa o indirectamente) trabajen en el proyecto.
También tiene que pensar como un usuario para poder satisfacer todas sus necesidades.
Pero es que además debe saber gestionar los contenidos de una web para que el usuario encuentre de una forma fácil todo lo que necesita.
A un buen arquitecto de la información no le sobraría tener conocimientos de diferentes disciplinas como:
- Periodismo
- Diseño gráfico
- Marketing Digital
- Gestión de proyectos
¿Qué costos o riesgos tiene no aplicar una correcta Arquitectura de la Información?
Para alcanzar con éxito la árdua tarea de «arquitectos», tenemos que controlar el número de clics que necesita un usuario para conseguir su objetivo, también llamada «profundidad de clics».
Se dice que el máximo debe ser de tres, ya que más de esa cantidad supone la obligación de revisar la gestión de contenidos para facilitar su acceso.
Cada clic de más significa un aumento en las posibilidades de que un usuario se vaya de nuestra Web, frustrado por no encontrar lo que buscaba, en caso de situarse, por ejemplo, a 4 o más clics de profundidad.
Para darnos cuenta de la importancia de tener una buena arquitectura necesitamos conocer los costos que supondría no tener bien organizados nuestros contenidos:
1. Costo de no encontrar la información
Si el usuario no encontrara el contenido concreto en tu Web o el producto que busca en tu tienda Online, significaría dejar de vender un producto que éste iba buscando.
2. Costo de encontrarla
“Pero ¿qué me cuentas? ¡Si el cliente ha encontrado la información!»
Esto es, a buen seguro, lo que podrías constestarme, en el caso de que, pese a estar a una profundidad de clics excesiva pero (por casualidad o perseverancia del visitante) que la información buscada haya sido encontrada finalmente.
Sí, pero, ¿y si ha tardado el doble de tiempo en encontrarla de lo que debería?
Imagínate una intranet de una empresa en la que los trabajadores acceden a una base de datos continuamente para poder responder las consultas de sus clientes.
Si no tenemos esos contenidos bien estructurados, una consulta que puede durar un minuto se puede convertir en dos, y al cabo del día, ese trabajador a lo mejor sólo ha podido responder 5 consultas.
Si los contenidos estuvieran bien estructurados, ese mismo trabajador podría haber resuelto a lo mejor 8 o 10. ¿Entiendes ahora lo que quiero decir?
3. Costo de la construcción
Con la ayuda de la AI conseguimos estructurar los contenidos previamente.
De esta forma, no trabajamos a ciegas con posibles errores o agrupando la info de una manera no lógica, lo que acarrearía costos como los indicados en el punto anterior… unido a un aumento de costos en volver a reorganizar la información.
4. Costos de mantenimiento
Una información bien organizada nos permite saber en todo momento dónde encontrar cada porción de la misma para, llegado el momento, poder actualizarla o borrarla en poco tiempo.
5. Formación de los trabajadores
Imaginemos que contratamos a un nuevo trabajador para ayudarnos en la gestión de nuestro eCommerce.
Si tenemos todo en sitios lógicos y toda nuestra Web está bien estructurada, el tiempo que nos cuesta formar a ese nuevo trabajador será menor que si necesitamos el doble de tiempo para explicarle dónde está cada producto.
6. Costos de valor de marca
Una mala experiencia del usuario en nuestra web es uno de los peores daños que nuestra marca puede sufrir.
Un usuario que se va de nuestro sitio porque no ha encontrado lo que busca será un usuario que puede ir diciendo lo mala que es la Web, con lo que nuestra imagen de marca puede verse resentida.
Ahora que ya sabes los riesgos que conlleva no plantearse este tema en un proyecto digital:
¿Qué te parecen estos costos? ¿Te habías parado a pensar alguna vez lo importante que es tener toda la información bien organizada?
Fases de la Arquitectura de la Información
Podríamos decir a grandes rasgos que estos trabajos de organización del contenido en la Web de nuestro negocio se compone de dos fases:
Recopilar la información
En la primera fase tenemos que organizar todos los datos posibles que la empresa y la audiencia nos puedan dar.
Tenemos que recopilar toda la info posible, definir los objetivos principales que queremos obtener y estudiar a la audiencia.
Mostrar esta información al usuario
En la segunda fase tenemos que saber cómo mostrar estos contenidos para ese público en concreto.
Para ello, necesitamos tener un inventario exacto de los contenidos a mostrar para poder estructurar toda la información. Tenemos que implementar un sistema de categorías para poder ir agrupando cada porción de la misma.
Una vez que tenemos toda la información agrupada, pasaremos a la fase de navegación.
Tenemos que definir el sistema de navegación que ayude a navegar de una sección a otra: menús, botones, barras de desplazamiento o enlaces son herramientas que tiene el AI para poder ir definiendo este sistema de navegación.
Y por último, tenemos que saber mostrar esta información antes de empezar a implementarla. Para ello, contamos con herramientas de diseño gráfico que nos permiten realizar mockups o wireframes, y los árboles de contenidos para poder mostrarla de manera más intuitiva.
¿Cómo comprobar si la arquitectura de la información de nuestra Web es óptima?
Llegados a este punto, seguro que te preguntarás, ¿cómo puedo saber si mi web está bien estructurada o si necesita cambios?
Por si no lo sabías, seguro que ya usas herramientas que te están dando muchos inputs sobre cómo está funcionando tu sitio:
O, por ejemplo, Google Analytics. Gracias a ella también puedes analizar muchos datos sobre el comportamiento de los usuarios en tu site.
Aunque puedes comprobar muchos valores, yo te recomiendo los siguientes para no complicarte mucho:
- Porcentaje de rebote: el porcentaje de rebote nos indica que un usuario ha entrado en nuestra web, ha visto una página y se ha ido de la misma sin interactuar o ir a otra. Esto puede ocurrir por los siguientes motivos: o no le ha gustado tu contenido, o una vez que ha entrado y le ha gustado lo que ha leído, no ha sabido encontrar temas relacionados, o bien no ha sabido dónde ir por tu Web.
- Número de páginas vistas: este otro valor nos indica el número de páginas de media que un usuario mira dentro de nuestra Web.
- Tiempo de estancia: aquí compruebas el tiempo que han pasado los usuarios en tu sitio.
Si juntas estos tres valores, podrás saber el comportamiento de tus lectores.
Por ejemplo, no es lo mismo el usuario que entra y en menos de 10 segundos sale, que el que se pasa más de un minuto leyendo los contenidos que has mostrado y se va sin ir a otra página de tu web. Los dos cuentan en el porcentaje de rebote, pero ves que hay un usuario que te interesa y uno que no.
Otra forma de verlo es mediante el árbol de páginas que muestra el recorrido de un usuario, es decir, en el comportamiento/flujo de comportamiento.
De esta forma puedes conocer el camino que recorren los usuarios, de qué página vienen o qué página se van.
Conclusiones
Como ves, la arquitectura de la información es un recurso muy útil a la hora de diseñar y estructurar cualquier tipo de contenidos digitales, como hemos repasado en este artículo. No dejes este factor a la suerte. Estudia lo que quieres mostrar, cómo quieres mostrarlo y a quién.
Tu página web no sólo depende de elegir el mejor hosting, un nombre de dominio que llame la atención y moverlo por las redes sociales.
Tienes que estructurar la información y saber a quién quieres dirigirla para mostrarsela de la mejor manera posible.
Ahora déjame saber en los comentarios:
¿Qué acciones estás llevando a cabo para implementar una correcta arquitectura de la información?
¿Sabías antes de leer este artículo qué significaba este término?
Te espero justo aquí debajo en los comentarios para debatir sobre todo ello.
Info muy útil para mí que estoy comenzando. Muchas gracias
Saludos desde Cuba. Magnifico el artículo. Me ha sido de gran utilidad, estoy estudiando Ingeniería Informática y me va a ayudar a darle respuesta a un trabajo de la escuela y no quería perder la oportunidad de que supieras que el mundo te lee. No te canses nunca. Lo mejor para ti y para los tuyos.
Muchas gracias por toda esta información. Los contenidos me parecen muy interesantes. Soy una persona con ya 32 años de experiencia en la informática y cada día se aprende algo nuevo. Este Blog me ha servido para conocer una gran variedad de términos relacionados con la Arquitectura web. Soy estudiante y por el momento no he desarrollado páginas web, sin embargo, estoy por iniciar un proyecto escolar que requiere precisamente de una página web. Saludos desde México.